Mar. Sep 19th, 2023
    El futuro de la demanda de petróleo: ¿EVs o combustibles fósiles?

    Según un reciente artículo, las ventas de vehículos eléctricos (EVs, por sus siglas en inglés) están en aumento a nivel mundial, mientras que las ventas de vehículos de gasolina y diésel están disminuyendo. A pesar de este cambio, el gobierno de Estados Unidos continúa proyectando una creciente demanda de petróleo. ¿Por qué sucede esto y qué pasa si estas proyecciones están equivocadas?

    La Agencia Internacional de Energía (AIE) anunció recientemente que está proyectando un pico mundial en la demanda de petróleo, gas y carbón para 2030. Este cronograma es un avance significativo en comparación con estimaciones anteriores. La AIE atribuye este cambio a cambios en las políticas energéticas, el rápido aumento de tecnologías limpias como los EVs y la transición de Europa lejos de los combustibles fósiles. Las Naciones Unidas también destacaron el crecimiento de los EVs como un punto positivo en los esfuerzos por reducir las emisiones de gases de efecto invernadero.

    Se espera que los EVs dominen las ventas de automóviles a nivel mundial para 2030, siendo China el líder en este ámbito. Los analistas predicen que si los países continúan invirtiendo en mejorar su infraestructura eléctrica y de carga, se vislumbrará una disminución en la demanda de petróleo. A medida que los camiones eléctricos se vuelvan más comunes, es probable que la caída en la demanda de petróleo se acelere.

    A pesar de que se proyecta que la demanda de petróleo a nivel mundial alcance su punto máximo en un futuro cercano, las principales compañías petroleras están planeando aumentar su producción. La Administración de Información de Energía de Estados Unidos también pronostica un crecimiento continuo en la demanda global de petróleo y combustibles fósiles. Sin embargo, estas proyecciones podrían subestimar el potencial de crecimiento de los EVs.

    Las contradicciones entre la creciente adopción de los EVs y los planes de producción de petróleo socavan los objetivos del Acuerdo de París y podrían llevar a activos varados costosos. No es raro que las grandes industrias prioricen ganancias a corto plazo sobre la sostenibilidad a largo plazo. Las compañías eléctricas inicialmente desestimaron la energía renovable hasta que su penetración se expandió rápidamente. Incluso algunas han hecho lobby para obstruir un mayor progreso a favor de los combustibles fósiles.

    Si bien algunas grandes corporaciones han invertido en energías renovables, estas inversiones a menudo se compensan con considerables inversiones en exploración de nuevos combustibles fósiles. Esto incluye a empresas como BP y TotalEnergies, que han realizado compromisos climáticos pero continúan expandiendo la producción de petróleo.

    En conclusión, el futuro de la demanda de petróleo es incierto. Las ventas de EVs están superando las expectativas, lo que podría llevar a una disminución en el consumo de petróleo. Sin embargo, la industria petrolera y algunas proyecciones gubernamentales aún anticipan un crecimiento continuo en la demanda. Estas tendencias contradictorias resaltan la necesidad de una transición hacia fuentes de energía sostenibles y los posibles riesgos de aferrarse a los combustibles fósiles.

    Fuentes:
    – Agencia Internacional de Energía (AIE)
    – Informe «global stocktake» de las Naciones Unidas.